Tras mirar su documentación e información decidí que no encajaba lo suficiente con ellos, pues los niños me parecían demasiado mayores (yo tengo experiencia con niños más pequeños) y estaban demasiado en el countryside. Así que rechace a mi primera familia pues no sentí que tuviésemos casi nada en común.
Cuando rechazas a una familia (y encima a la primera) te quedas con la sensación de: no va a ver otras, ¿y si he hecho mal?....Pero luego piensas nosotr@s nos vamos de aupair para vivir una experiencia inolvidable y estar a gusto durante ese año o el tiempo que estemos, por lo tanto no debemos conformarnos con cualquier cosa por miedo a no conseguir lo que esperamos. Debemos tener paciencia.
Besos Marta
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